El Teatro Ramiro Jiménez está construido en un espacio que por azares de la vida estaba destinado a ser un espacio en cual se manifestara de algún modos el arte, puesto que el terreno era propiedad de Maestro Diego Rivera, Lupe Rivera su hija fue quien hizo la venta, en el año de 1976 cuando Ramiro Jiménez todavía era Gerente-administrador y productor en el Teatro Insurgentes el cual también lo vio nacer y participo desde sus inicios.